La eficiencia energética busca obtener los mejores resultados en cualquier actividad, empleando la menos cantidad posible de recursos energéticos, para reducir los posibles impactos ambientales asociados a ello.
Se trata, por tanto, de mantener el mismo rendimiento de una actividad pero incorporando una serie de modelos de gestión sostenibles, hábitos responsables e inversiones en innovación tecnológica.
Ante esta situación, optar por energía renovable, se convierte en una solución perfecta. En España, alcanzaron el pasado año una cuota de producción del 46,60%, cifra que se prevé que siga ascendiendo en 2023.
Esto se debe, en parte, por las atractivas tarifas de las comercializadoras de energía verde, y en parte, por las múltiples subvenciones que está facilitando el Gobierno a las instalaciones fotovoltaicas.
A continuación, te vamos a dar las claves para que te decantes por la energía renovable en tu reforma o construcción.
Tarifas de energía renovable
Optar por tarifas de energía renovable en nuestra vivienda tiene múltiples ventajas, entre ellas, la sostenibilidad y la reducción de gases de efecto invernadero y de emisiones contaminantes, por tanto, ayuda a proteger al medio ambiente.
El interés de los usuarios más concienciados por este tipo de energía verde libre de contaminantes cada vez es mayor, por este motivo, las empresas energéticas están poniendo a nuestra disposición la contratación de tarifas verdes, que, además, nos proporcionan un mayor ahorro en la factura de luz.
Para contratarlas, podemos realizarlo a través de las principales compañías eléctricas, de pequeñas empresas especializadas o de cooperativas de energías renovables.
A la hora de decantarse por una tarifa u otra, es recomendable comparar las diferentes ofertas para localizar la que mejores condiciones de contratación y precio ofrezca a nuestro inmueble.
De igual manera, la empresa energética deberá de estar certificada por la CNMC, la cual acreditara que dicha energía es renovable en un Certificado de Garantía de Origen.
Autoconsumo solar
El autoconsumo solar se consigue con la instalación de placas solares en las inmediaciones de un suministro, las cuales son capaces de convertir la radiación solar en la energía eléctrica que necesita el inmueble para su normal funcionamiento. En resumen, permite consumir energía completamente gratuita durante toda su vida útil, que es de unos 25 años, fomentando la independencia energética del suministro.
Esta instalación permite al suministro continuar disponiendo de la red eléctrica, produciéndose un ahorro en la factura de un 70%, y además, se puede vender la energía no consumida del sistema y recibir una compensación económica por ella en el recibo.
O bien, se puede optar por una instalación aislada de la red eléctrica y eliminar por completo el gasto de luz, pero se tendrá que disponer de una batería de litio que almacene la energía para los días en los que las placas solares no pueden producirla.
Coste y amortización de las placas solares
Para hacernos una idea, llevar a cabo una instalación fotovoltaica tiene un precio aproximado de 4.500 €, incluyendo los equipos y la mano de obra, convirtiéndola en una inversión muy rentable que se puede amortizar en unos 5 años.
Dichos datos pueden variar en función del tipo de inmueble y de sus necesidades energéticas, de las horas de sol de la provincia, y del precio de la factura de luz del último año.
Además, gracias a las ayudas que está proporcionando el Gobierno para promover la implantación de paneles solares, se puede cubrir hasta un 50% del precio total de la instalación, reduciendo consigo su amortización a menos de 3 años.
Por último, si estás pensando vender o alquilar el inmueble tras la reforma, incrementará su precio hasta un 5% disponer de este sistema.